De Purísima y oro
La emBoscada

Si los obispos piden adelanto electoral, este Blog se une a la campaña de
Wayoming y pide el adelanto del juicio final como solución definitiva a la crisis
¡No más parches!

Saturday, October 29, 2005

Ni él ni yo entendimos nada (nunca) o ¡todo es mentira, hasta al tren!

Cuentan que, muy cerca de aquí, hace ya (como de casi todo) algún tiempo, había un nombre de mediana edad, que recorría sin cansancio los cinco kilómetros que le separaban de Ronda arrastrando una rama de un árbol a modo de remolque, mientras imitaba el sonido de un coche.
Llegaba a la estación de ferrocarriles a eso de las cinco y media y pedía un billete, que nunca pagaba, para volver en el correo a su pueblo natal.
Dicen que un día, con el tren estacionado en la vía, pidió su acostumbrado billete, el empleado de la taquilla, cansado de pagar de su bolsillo, le contestó: ¡Hoy no hay tren!.
El tonto, sorprendido por la afirmación, volvió la cabeza hacia el andén, se quedó fijamente mirando al tren estacionado y exclamó: ¡¡¡ Todo es mentira, hasta al tren!!!
Está claro, que el tonto y yo no hemos entendido nada, (nunca) ni queremos entender, sería demasiado fuerte, demasiado racional para nosotros.

Por cierto hoy se ha ido alguien que tampoco entendió nada nunca o tal vez lo entendió todo y por eso se fué, ¡va por él!

No comments: