El fracaso de la Massia, el fin del bipartidismo y un parado menos

Dicen los del fútbol, que el éxito del FC Barcelona radica en su modelo de cantera, jóvenes criados en la Massia a cubierto de toda influencia, con una formación diseñada desde dentro y basada en una determinada escala de valores.

Desde hace años, y especialmente desde que Zapatero fue elegido secretario general del partido, el PSOE adoptó el modelo Massia, jóvenes que sin formación,  en los primeros años de la Universidad o como mucho con la carrera recien acabada,  optan por dedicarse profesionalmente al partido, ingresan en juventudes en su más tierna infancia y salen ya con la cuarentena,  circunstancias que  les permite una  buena posición en la "pole"  de cara a las distintas listas electorales

 Sin otra experiencia laboral que la de la política y la facilidad para  elaborar un estereotipado discurso para cualquier cuestión que se les pueda plantear, son criados en  las alfombras de diputaciones, ayuntamientos y consejerías, con un buen sueldo,  más de un teléfono movil, permanentemente conectados entre ellos, con un total desconocimiento de la vida normal y con menos experiencia laboral que el marido de la Gunilla,  son capaces de votar cualquier cosa que se cruce en su camino, desconocedores del más mínimo sentido de la crítica y mucho menos de la autocrítica, estos cachorros de la Massia socialista han terminado por llevar al PSOE a este absoluto descalabro electoral.

El fracaso de la Massia socialista es evidente, un partido en el que es más fácil que te den de baja por dejar de pagar la cuota que por estar imputado, debe replantearse muchas cosas, un partido que ha jubilado a dirigentes con una valía fuera de dudas, con un prestigio personal, profesional  e internacional inmenso para sustituirlo por cachorros de la cantera sin más mérito ni formación que la de ser joven o ser mujer y  pertenecer a la Massia (léase Juventudes Socialistas), debe replantearse el modelo. De momento el PSOE debe  buscar a un Guardiola,  que regenere la política de la cantera, que les inculque que la experiencia laboral debe ser anterior al cargo público, que eleve la moral y refuerce el códogo ético, a partir de ahí, podrá formar equipo y hacer el tiquitaca.

Quienes sí han conseguido su objetivo han sido los de la Puerta del Sol,  con los que reconozco simpatizo sin reservas, ellos ya no piden lo imposible como en mayo del 68, ahora sólo se limitan a pedir lo rozanable, y pideron que se acabara  el bipartidismo y se ha acabado, ya sólo hay un partido: el PP, los demás no son más que residuos estadísticos.

Y entre tanta desgracia, al menos hay una buena noticia, ayer, a los pocos minutos de confirmarse la victoria del PP, España ya tenía un parado menos, Mariano Rajoy dijo que se ponía a trabajar, podía haber dicho que seguiría trabajando, pero no lo hizo. Bienvenido al mundo laboral, Mariano.