La denuncia por la muerte de entre 17 y 43 pacientes en el hospital de Leganés puede marcar un punto de inflexión en el tratamiento de los enfermos terminales, no quiero equivocarme y mucho menos culpar ( o culpabilizar, que dicen los modernos y los políticos) a nadie, pero quiero recordar que no hace mucho sectores integristas habían anunciado la legalización de la eutanasia en España sin que nadie del gobierno hubiera dicho ni una palabra sobre este tema. La respuesta del personal en el sentido de apoyar al coordinador de urgencias del Hospital de Leganés parece que augura que el cese preventivo además de preventivo ha sido equivocado y es que las denuncias anónimas puden tener retranca.
Ahora la justicia dede de encontrar la verdad y en caso de demostrarse la falsedad de la misma, debe descubrir al autor de la misma, de lo contrario los enfermos terminales sufrirán más de lo necesario ya que se generalizará el miedo y a continuación la praxis defensiva de forma que ahora, que casi hemos superado la maldición biblica de parir con dolor, volveremos a morir con dolor, en definitiva, el valle de lágrimas, ¡como debe ser!
Ahora la justicia dede de encontrar la verdad y en caso de demostrarse la falsedad de la misma, debe descubrir al autor de la misma, de lo contrario los enfermos terminales sufrirán más de lo necesario ya que se generalizará el miedo y a continuación la praxis defensiva de forma que ahora, que casi hemos superado la maldición biblica de parir con dolor, volveremos a morir con dolor, en definitiva, el valle de lágrimas, ¡como debe ser!
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