Hay un personaje de la política española que me llama poderosamente la atención, es Don Marcelino Oreja.
Este señor de aspecto respetable, barba y pelo cano, chaqueta azul cruzada, tipo blassier, corbata de tonos discretos, en fin, eso que siempre se ha dicho ¡todo un caballero!, me llaman la atención tanto sus silencios como sus sonoras declaraciones, si ustedes lo observan nunca habla de algo que no sea enfrentamiento y división ¡jamás le he escuchado una sola palabra que exprese una idea política! ¡jamás una opinión sobre un problema político! ¡jamás una propuesta! eso sí, alterna sonoras diatribas con prolongados silencios.
Si no me equivoco creo que ahora anda en Europa, y yo me pregunto ¿habrá dado algún mitin este caballero? ¿habrá dicho algo en Europa? ¿sabrá que se ha celebrado un referendum?
Este señor de aspecto respetable, barba y pelo cano, chaqueta azul cruzada, tipo blassier, corbata de tonos discretos, en fin, eso que siempre se ha dicho ¡todo un caballero!, me llaman la atención tanto sus silencios como sus sonoras declaraciones, si ustedes lo observan nunca habla de algo que no sea enfrentamiento y división ¡jamás le he escuchado una sola palabra que exprese una idea política! ¡jamás una opinión sobre un problema político! ¡jamás una propuesta! eso sí, alterna sonoras diatribas con prolongados silencios.
Si no me equivoco creo que ahora anda en Europa, y yo me pregunto ¿habrá dado algún mitin este caballero? ¿habrá dicho algo en Europa? ¿sabrá que se ha celebrado un referendum?
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